Te despiertas, y lo
primero que haces es coger tu móvil. Confiésalo. Haces un repaso a
su agenda, o repasas tu Facebook, o miras tu cuenta de Twitter, o te
pasas por el portal web de cualquier periódico de referencia.
Después de unos minutos vas a la cocina y no sabes que desayunar,
pero no tienes a penas tiempo porque debes salir de casa cuanto
antes.
Ya es muy tarde y, por
fín, llegas a casa. No has parado en todo el día, trabajo,
gimnasio, correo, recados, móvil, etc. Vivimos en un mundo en el que
no hay tiempo para dedicarnos a nosotros mismos. Hay una división
muy popular que habla de 8 horas para dormir, 8 horas para trabajar y
8 horas para el resto. ¿De verdad cuentas con esas 8 horas 'libres'?
Sé sincero. No.
Pienso que la vida que
vivimos no es vida muchas veces. Deberíamos aprender de las culturas orientales a
vivir de forma más pausada. Estoy seguro de que mejoraría nuestra
salud y seríamos más felices a largo plazo. La naturaleza ya nos demuestra que
los mejores platos se consiguen 'a fuego lento'.